La Clementina
Tipo de local: Ultramarinos
Zona: Centro-Alameda
Dirección: C/ Peris Mencheta, 22
Horario: L-D 10:00-16:00 y de 18:00-22:30
Descripción: El día 2 de febrero de 2002, dos hermanas extremeñas abrieron las puertas de La Clementina. Este humilde ultramarinos se encuentra en la calle Peris Mencheta, y ha sabido adaptarse tanto a la clientela tradicional de la calle Feria, como a la ecléctica y variopinta procedente de La Alameda. Dicha conciliación de dualidades, casi intrínseca a este negocio diría yo, se refleja igualmente en la propia disposición de la tienda. Si bien su escaparate muestra camisetas de diseños alternativos y frescos, su interior se asemeja a los tradicionales colmados. Así pues, maravillosas estanterías color crema exponen en sus vitrinas todo tipo de enlatados y conservas, junto a una curiosa colección de cerdos de juguete de diversos materiales. Otro ejemplo de “vuelta de tuerca” es el típico techo de vigas de madera, que se ha pintado de azul y blanco, y del que cuelga un móvil de madera en forma de gaviota, aportando un toque marinero a la estancia. Al fondo, se adivina la trastienda, separada por esas cortinas de tiras que tanto hemos visto en nuestra tierra.
Llevando el rumbo de este ultramarinos se encuentran las dos hermanas, una capitaneando el turno de mañana, gestionando proveedores, haciendo pedidos, etc. y la otra, la “Beni”, en el turno de tarde, ganándose a la clientela con su don de gentes, su buen hacer y sobre todo profesionalidad. Dos caras de una misma moneda, dos polos que conservan un equilibrio y hacen de La Clementina un entrañable punto de referencia en esta zona de Sevilla.
Productos destacados:
Zona: Centro-Alameda
Dirección: C/ Peris Mencheta, 22
Horario: L-D 10:00-16:00 y de 18:00-22:30
Descripción: El día 2 de febrero de 2002, dos hermanas extremeñas abrieron las puertas de La Clementina. Este humilde ultramarinos se encuentra en la calle Peris Mencheta, y ha sabido adaptarse tanto a la clientela tradicional de la calle Feria, como a la ecléctica y variopinta procedente de La Alameda. Dicha conciliación de dualidades, casi intrínseca a este negocio diría yo, se refleja igualmente en la propia disposición de la tienda. Si bien su escaparate muestra camisetas de diseños alternativos y frescos, su interior se asemeja a los tradicionales colmados. Así pues, maravillosas estanterías color crema exponen en sus vitrinas todo tipo de enlatados y conservas, junto a una curiosa colección de cerdos de juguete de diversos materiales. Otro ejemplo de “vuelta de tuerca” es el típico techo de vigas de madera, que se ha pintado de azul y blanco, y del que cuelga un móvil de madera en forma de gaviota, aportando un toque marinero a la estancia. Al fondo, se adivina la trastienda, separada por esas cortinas de tiras que tanto hemos visto en nuestra tierra.
Llevando el rumbo de este ultramarinos se encuentran las dos hermanas, una capitaneando el turno de mañana, gestionando proveedores, haciendo pedidos, etc. y la otra, la “Beni”, en el turno de tarde, ganándose a la clientela con su don de gentes, su buen hacer y sobre todo profesionalidad. Dos caras de una misma moneda, dos polos que conservan un equilibrio y hacen de La Clementina un entrañable punto de referencia en esta zona de Sevilla.
Productos destacados:
Como buenas extremeñas, las propietarias se vuelcan en productos de la tierra, destacando el Pimentón de la Vera (que lo obtienen desde el mismo origen), la Torta del Casar (en temporada), junto a otros quesos de los Berrocales Trujillanos y las inigualables chacinas de Badajoz. Además, muchos acuden por sus bocadillos “a la carta” (como reza el cartel), así que probadlos porque... “donde fueres, haz lo que vieres”.